
Memorias de Karen Blixen en las que relata sus experiencias al frente de una plantación de café en Kenia entre 1914 y 1931. La narración ofrece un rico retrato de la vida colonial en África Oriental, mezclando anécdotas personales con vívidas descripciones del paisaje, las culturas locales y los desafíos de mantener una plantación en una tierra extranjera.