Marianne Dashwood se enamora del apuesto John Willoughby e ignora la advertencia de su hermana Elinor de que su comportamiento impulsivo la hace vulnerable a chismes e insinuaciones. Mientras tanto, Elinor, sensible a las relaciones sociales, lucha por ocultar su propia desilusión amorosa incluso a las personas más cercanas a ella. A través de su experiencia, las hermanas llegan a la conclusión de que si quieren encontrar la felicidad personal en una sociedad donde el estatus y el dinero rigen las reglas del amor, los sentimientos deben combinarse con la sensibilidad.